6 de septiembre de 2004

Réquiem (este es el primer acto de mi canción final)

Acuarius Wasarry Réquiem.

La verdad no recuerdo como comenzó todo, solo me recuerdo que de un día hacia aca todo empezó a ser solo gritos, improperios, insultos, desequilibrio, cosas por el estilo, de un momento hacia aca todo se veía tan diferente, con otros matices a los que a conocía.

Ya tengo 20 años en esta casa, la verdad no tengo otra idea que no sea seguir siendo parte de esta familia además, nunca he visto nada diferente, solo mas dolor y desolación; este fue siempre mi lugar escondido para alejarme, para no odiar mis entornos, para no odiarlos a todos.

No podría describir todo lo que me ha llevado hasta donde estoy ahora, para ser mas claros, no tengo la mas mínima idea de la zona de origen de esta tormenta que arrazo con todo, la verdad ni siquiera creo saber los verdaderos danos que dejo.

Siempre se me ha tratado de ocultar todo bajo el más estricto de los secretos, como si yo fuera una pieza de porcelana invaluable, como esos malditos jarrones chinos que he visto por ahí en museos. Tampoco entiendo el porque, si se me entreno (para no decir que me educaron) para tratar con un mundo que va en contra de las líneas causales de la felicidad, contra de un mundo que ataca, contra un mundo que arremete de una forma indescriptible y que puede hacer daños incalculables.

Me consideran el eslabón débil de este hogar, talvez lo soy; y para ser sincero por 19 años nunca me molesto, nunca me hizo mal ser el protegido de este principado, siempre me gusto mi posición de príncipe y mi reinado fue macabro: me comporte de una forma tal que aun hoy lo estoy pagando. Talvez no lo haga con castigos grandes, sino con acciones que he tenido que tomar; luego de ser el noble he llegado a un puesto de servidor, he tenido que arrodillarme y pedir perdón, pedir miles de perdones a quienes con mis palabras o acciones les hice daño de una forma tal vil.

Pero bueno, de eso siempre he estado consciente y no estoy en contra de hacerlo, pues es mi castigo por tanta hipocresía y falta de tacto frente a la vida y los sentimientos de muchos, personas a las cuales de una forma u otra marque con mis acciones: de eso si puedo decir que me arrepiento.

Mis verdaderos males, lo que me atormentan, comenzaron hace ya un año (para ustedes que conocen mi vida ni siquiera he de decir porque pues ya seria mucho repetir); desde ese día me vi forzado a huir, a cambiar los hábitos de mi existencia, a tratar de mostrar que yo estaba ahí, que no era un jarrón de porcelana, que podía tomar decisiones, que estas podían ser tan acertadas como las de cualquier otro fue todo en vano.

Al contrario de todo lo que esperaba mi vida se transformo en sombras de mis protectoras, pase de ser un protegido a ser un mimado y sobrevaluado joven de ciudad. La verdad eso es una basura!. Pero los caminos del señor son misteriosos según dicen, y aquí estoy, tratando de borra ese calificativo de los latigazos de mi vida, aunque tengo que ser totalmente sincero, es muy difícil.
Las cosas están cada día peores, al parecer esto se ha convertido en alguna tragedia poética de las de William Shaskpeare, donde el final siempre ha sido y será el mismo. Bueno, hasta el día en que descubra eso y pasen situaciones nuevas que ameriten decisiones estúpidas y rápidas en mi camaleonesca vida (alguno que otro intento de suicidio), les aseguro que serán los primeros en saber.

Hoy escribo este intento de réquiem, seria la primera parte, lo que en la vida llaman "la etapa de inmadurez del ser humano", o en otras palabras adolescencia y niñez; aquí no justifico ni acciones ni hechos, no creo pertinente hacerlo, si lo hiciera estaría repitiendo mis errores y no daría el paso que estoy tratando de hacer.

Se los estoy comunicando con finalidad ninguna, es decir, ni siquiera tengo una razón lógica ni mucho menos cuerda, cuerda, así que por favor no hagan preguntas y solo lean; tampoco quiero opiniones ni consejos, ese no es el cometido de estas líneas.

Ah!, déjenme aclarar que esto no es ningún anuncio de muerte ni nada por el estilo (aunque esto es un réquiem), la verdad es solo la primera parte de un episodio que pienso terminar algún día si tenemos la oportunidad de estar comunicados y vivos. Les pido lean con cuidado y nunca olviden estas líneas, esta es la ultima canción que escribiré; estas son sus primeras estrofas.

Say No More.

Acuarius Wasarry.

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